Me gusta usted señorita, y mucho
tanto y mucho que duele cuando gusta
Me gustan sus ojos
pero punza su mirada
me gusta su boca
pero quema con sus besos
me gustan sus manos
pero arden sus caricias
me gustan sus cumplidos
pero ortiga su sarcasmo
me gusta su sonrisa
pero amargas son sus lágrimas
me gusta su presencia
pero duele y mata su ausencia
Me gusta señorita, y me gusta
que me guste. Pero gusta tanto
que duele cuando gusta.