Hoy quiero dedicarle un poco de mi tiempo s este sector de personas,
Que la gente margina, de la que no se habla y poco se sabe. De la que no
Se escucha y dejan de lado, de los que se siente más pena que aprecio.
Ellos son: Nuestros Adultos Mayores.
Antes, los hijos, los abuelos y los nietos, se sentaban a escuchar lo que tenían
Para contar de lo vivido años atrás.
Antes la palabra de los adultos mayores era religión.
Antes en la meza familiar de los domingos no faltaba nadie y hasta que el último no terminaba
De comer no se levantaba nadie.
Antes, el tecito con la vecina era un acontecimiento de todas las tardes.
Hoy siglo XXI los jóvenes no escuchan, no hablan, ignoran.
Hoy si cuentan lo vivido dicen:¡Hay abuelo! Eso es de otra época, ahora nada es
Lo mismo, ni nada siquiera se asemeja.
Pero en realidad no existen épocas, es vida ellos supieron ser jóvenes y el reto
De los jóvenes es vivir como tal, porque también los jóvenes seremos viejos.
Envejecer es como escalar una montaña, mientras se sube, las fuerzas
Disminuyen, pero la mirada es mucho más libre y la vida es más amplia y sabia.
La vejez comienza cuando el recuerdo es más fuerte que la esperanza, las risas pesan
y los dolores son más fuertes que las ganas de continuar.
Podes envejecer tan solo por afuera pero en el interior de tú ser
Puedes sentirte como un chico de veinte años .
Cuando te dicen que eres demasiado viejo para hacer lo que te gusta o cumplir
Ese sueño que todavía no hiciste, procura hacerlo enseguida y luchar por ello.
Porque lo que te gusta y sueñas, da vida, alimenta el alma y lo alivia. Y sabes, me doy cuenta
Cuando veo los ojos de un abuelo
En La Juventud Se Aprende EN LA VEJEZ SE ENTIENDE.