Te entregué mi corazón
envuelto en papel de regalo.
Pero, como siempre, sin razón,
fuistes con él muy malo.
Me dejastes sin pensar
en nuestro eterno amor.
Te quise y no te dejaré de amar
aunque el sufrimiento es abastecedor.
Por tí seguiré luchando
y te pido por favor
sigueme considerando.
Te quise, te quiero y por
siempre te seguiré queriendo.