wida boutayab

Mi querida dulce voz

¡ Oh voz mía quién diría que fueras tan atrevida ! quien no te conoce te endurece y el que no te conmueve te exige, no estaría tan segura de tu estima pero si de que eres mía mi dulce melodía. Cuando lo ves te acercas a él con tus dulces palabras, con tu media moral, tu justa divulgación y tu saber que decir, no son nada más que perturbaciones que te delatan y tú solo te conllevas con ella en pequeñas voces. Ella es todo para mí ,es la que me conlleva a todas partes y gracias a ella puedo decir no al dolor simplemente con pudor, no a la desgraciada exigencia que es remitente de la cruel vida. ¡ Oh mi querida voz ! ¿quièn diría que fueras mi dulce concepción ? dulces conceptos sacas de mí y me introduces lo que es sencillamente la razón.