La tarde en su esplendor del horizonte
me sonreía diciendo te veré mañana ,
mi espíritu sediento de esa vida
maravillosa en jubilosa presencia
quedaba lleno de luz
en la espera del siguiente encuentro
que ya se había anunciado
que seguiría aquí presente en
este vivir de días llenos de amor
de un convivir con esta grandeza
que el Gran Creador compartía
con los mortales e inmortales ,
dejándolos gozarse en sus momentos
de lo que había surgido de su amor
por la vida , sea esta material
o la que gozan sus Ángeles en la
sutil dimensión donde el tiempo
no se prolonga sólo existe
sin existir , sin gastarse ,
sin fracionarse , sólo se vive .
Hasta allí llegaban mis sentidos
sabiendo que había algo mas
despues de ese existir que se
me había permitido por el
momento comprender ;
pero se me decía llegarás
a donde quieras llegar .