Rosa Baladron Rodriguez

UNA LÁGRIMA

Una lágrima de plata

brotaba de sus pupilas,

pero ella la escondía

para no causar tristeza.

 

Una lágrima que súbito

aparecía sin darse cuenta,

a veces era de alegría

otras de pena intensa.

 

Una lágrima de emoción

al recordar su pasado.

Hay historias de las gentes

que impresionan y entristecen,

cada cual lleva su cruz,

la vida exige ser muy valiente.

 

Hay que vivir alegres

y valorar lo que tienes,

muchos hay que nada poseen

y cuando los ves

siempre sonríen.

 

Sus ojos claros y grandes,

su cara resplandeciente

cuando salen por la tele,

son un ejemplo excelente

y con ella nos reconocen,

nuestras donaciones.

 

Entre injusticias y miserias

son una luz para el mundo.

Muchos países ayudan

y ellos con poco cosa

disfrutan y se conforman.