Deseo agradecer en éste día, primeramente a Dios, al ése ser supremo que guía el alma del poeta que enamorado de la vida, le canta a la alegría, a la tristeza, al amor, a la madre, al amanecer y a anochecer del nuevo día, a la inmensidad del mar, a todo lo creado, a lo que conoce, desconoce o anhela conocer, luego deseo agradecer a las madres que cobijaron en sus vientres a todos los poetas y cuidaron de sus hijos con amor, afán, esmero y dedicación, a ese ser único dotado de la magnificencia del ser humano, a los padres que diariamente velan por sus hijos con la esperanza inédita de un mundo mejor.
Luego a la madre tierra que diariamente nos concede el sagrado alimento para el sustento del hombre, a los niños que con su inocencia nos irradian de sentimientos puros, para inspirar por ellos velar y anhelar un mañana digno de sus aventuras infantiles, pues ésos sueños serán en el mañana, la realidad de un mundo grande, donde todos quepamos sin distinciones ni rangos.
Y finalmente quiero agradecer a Uds. poetas hechos de la grandeza del complemento de la salvia de la vida, del dolor de la tristeza, de la pobreza, de la angustiante inspiración que golpea sus almas desplegadas al viento, cuales andarines danzantes que buscan en la inmensidad de la noche la belleza de la palabra que sucumbe en el alma, para convertirla en versos, para mitigar la sed que se apodera de los corazones sedientos de palabras.
Muy particularmente a mis compañeros de éste hermoso portal, que nos arrulla cuales niños sedientos de la luz que nos transporta hacia el umbral de nuestra amada poesía.
A todos Uds., quiero desearles un venturoso año 2014, un mágico mañana, así como también deseo dedicarle una oración para que la musa que vive en Uds. no muera, no perezca y que el tintero de sus plumas sea siempre lleno en el conocimiento, la proeza y la pureza de una poesía que incite al amor y al continuar de cada día.