Esos besos tuyos con sabor a gloria
seducen mi sentir enamorado,
su candidez pegado en la memoria queda,
Fundiendo en una sola
nuestras almas.
Enloquecidos mis labios
de ansiedad tiemblan,
al sentir, ese sabor embriagador
del besar tuyo.
Al rozar tu piquito de coral partido
olvídome quien soy.
No se donde me encuentro,
me pierdo en la inmensidad de tus quereres.
Deseando seguir gozando tus labios,
degustando su néctar,
hasta el morir.
Tus besos provocadores a pecar me incitan,
y si eso es pecar,
te hurtaré mil besos más
aunque al infierno marchare,
llevando en la boca mía,
el eflubio de fruta del paraiso
que exhalas.
bambam