Amigo: Palabra sabia que al pronunciarse
encuentra en si el sentido de la vida
amigo: Sin duda aquel que al retirarse
dejará tu vida, marcada con su partida.
Elegirte amigo, en estos tiempos de escuela
con travesías, llantos y tristezas recordadas,
llamarte amigo, recordando noche en vela
una más de aquellas, las jamás olvidadas.
¿Recuerdas nuestras noches de desvelo?
aquellas que entre risas disfrutamos,
¿Recuerdas que también vivimos duelo?
en los momentos por amor llorados.
Y que decir las mujeres aquellas
que te arrancaron el suspiro y hasta el mismo llanto
la que te hizo feliz con sus querencias
a la que jurabas y decías amar tanto.
Hoy puedo decirte con certeza
que la familia no siempre es la que heredas,
pues los amigos también son fortaleza
y con el tiempo tus hermanos consideras.
Y se unen a tu vida por tiempo indefinido
y pasarán quizás diez años sin mirarse
mas la amistad es un sueño compartido,
una flama que no habrá jamás de extinguirse.
Amigo mío, eres ya mi nueva familia,
aquella en quien no temo apoyarme
aquel corazón de la sonrisa tibia
y del abrazo que llega sin llamarle.
Seguro estoy que no he errado
al llamarte amigo, y también hermano
seguro estoy de que te he encontrado
por qué Dios así lo ha querido.
Mas te puedo decir que en tu persona
encuentro paz, quietud y consuelo
pues es tu corazón y lo que razona,
que me impulsan a llamarte amigo.
Quizás me vaya yo, quizás seas tu primero
quien corte del camino bellas flores,
quizás el padre tiempo detenga el segundero
quizás no volvamos a sentir temores.
Mas mientras la bella vida se encuentre
en nuestros corazones, viva y frágil
he de mostrarte que solo soy un hombre
que vivió y parecía tan fácil.
Que no debes temer si te ves solo
que deberás sentirte agradecido,
con la vida, con dios contigo mismo
pues no habré de sentirme despedido.
Viviremos uno por el corazón del otro
y los recuerdos nos mantendrán vivos
mientras tu estés, vivo en tu recuerdo,
y si no estás tú, vivirás aquí, en el mío.
CON ESPECIAL AMOR Y CARINO, PARA MI
AMIGO Y HERMANO
ALEXIS ORTEGA JIMENEZ.
GRACIAS POR ESTAR SIEMPRE AHÍ