Una melodía suena en mi mente cada día
Es tu voz que en mi silencio me llena de alegría
Agraciada por encantos de miradas complacidas
En sutiles vibraciones dulcemente agradecidas
Cuerdas de guitarras, cantan coros afinados
Espacios tan vacios tu concierto los habitó
Juegan tus notas y melodías con tanta algarabía
Que no dudaría en seguir soñando contigo cada dia
Inundas con paciencia mis momentos de tormenta
Calmas esos mares con tus manos de doncella
Contemplo mil tesoros que en ti yacen sumergidos
Quiero ser su poseedor y fiel guardián de tus caprichos
Llegue hasta ti por un sendero iluminado
Dios era mi guía, solo en el había confiado
Obstáculos y espinas, constante muro desafiando
Al final estabas tú, con los brazos esperando
No olvides nunca que aun yo sigo aquí a tu lado
Cada día que amanece, dios y tú, mi gran regalo
El que pedí alguna vez con mis ojos ya cerrados
El que soñé, el que luche, y en mis versos te había llamado
SIR CAMELOT