No me digne a quererla,
Sabia que no podía tenerla.
Y a pesar de que ella desesperadamente buscaba amor
Nunca le interesó el que le ofrecía yo.
Ella era pura y bella como una perla
Radiante y cálida como el primer rayo de sol que asoma en la mañana...
No quería que ella me rompiera el corazón
Ella nunca me amaría...
Jamás seria testigo de su mas inconfesable pasión,
Y aunque a veces la sentí muy cerca,
También sentí su desprecio e indiferencia...
Porque una mujer nunca dejaría escapar al hombre amado
Y ella en ninguna ocasión me ha llamado,
Ni tan siquiera una sola vez me ha buscado
Y aunque me rompa el corazón todo esto haberos confesado
Nunca me he dignado a quererla
Pero si que la he amado