Cuando yo no esté se te hará largo el camino,
cuando yo no esté, tus oídos,
huérfanos de mis caricias hechas palabras,
lloraran mi ausencia,
cuando yo no esté el silencio cotidiano
gritará en tu cabeza la distancia,
cuando yo no esté
caerás
en las revueltas aguas del olvido
suplicando perdón a las voces del ayer.