kafkegard

El motivo de tus ojos... Fatima mía.

Tus ojos, Fatima, son tán bellos

como el dulce atardecer,

que a través de todos los tiempos,

amor mío, cautivan todo mi ser.

 

¡Oh! Tus bellos ojos,

amor, como embellecen,

son tán hermosos

que a mi ser enloquecen.

 

¡Oh!, Dios, soy tán bendecido

al mirar sus bellos ojos,

gustoso, de tí, mi amor, atraido.