Una niña que juega en el cementerio
subraya que la vida es asunto serio.
Que aunque esté la mañana gris y fría
hay que tratar de hallarle su alegría.
Que hay que encontrar la luz para este mundo
dentro del propio pecho en lo profundo.
Que si en tu corazón arde tal brasa
Dios tras de tus costillas se siente en casa.
Una niña jugando entre las tumbas
canta que ante la pena no sucumbas.
Que el padre sol entibia también la muerte
y para sonreír hay que ser fuerte.
Una niña entre muertos con su inocencia
y enseñando a vivir ¡sabia inconciencia!