Dejame llenarme del ardor de tu cabello azabache,
perderme en tus oscuros ojos gitanos.
Enloquecer bajo tu aliento y
enrredarme en la oscuridad de tu piel.
Si acercas tus labios a los mios,
olvido la existencia, no recuerdo el tiempo,
ni tengo presente.
Mágico duende azul que habitas en el más oscuro de mis deseos.
Llegas de noche e invades mi mundo onírico
susurrando frases que me inclinan a volar entre nubes
cargadas de olvidos y añoranzas...
Volteas mis ansias y me sumerges entre palidas pasiones.
Eres libre como negro jinete, hueles al humo del deseo
y me sujetas en tu boca.
Vete al amanecer,
dejame embriagada de tu locura
y esperar tu retorno cuando baila la luna,
enrojece el mar y caen las estrellas.
Te veré llegar...
Sutil y silencioso como la niebla,
sublime como la brisa.
Dejame esperando atenta,
escuchar tus pies descalzos... Mi silencioso gitano.