Son los versos que cantan
como canta un ruiseñor.
Que se expresan con ternura
acompañados del amor.
Que susurran entre vientos.
Que cantan los sabores de la vida.
Que lloran con lágrima en rima.
Que ríen con acentos musicales.
Que sienten el calor bajo la piel del enamorado.
Que extasiados miran los horizontes del mañana.
Que escuchan los pasos de los sonetos.
Que suspiran las delicias de un te quiero.
Y eres tú, poeta, el que da vida a esos versos.