Tal vez sea el momento,
hace tiempo ya,
de aterrizar a tierra.
He llevado a cuestas conmigo
mil maneras de erradicar lo que fue en vano
y lejano a mi hasta hoy,
fue de mi fructífera razón
que los desenlaces
de fe y prueba de valor
me demostraron el miserable trueque
que se volvió el querer ser parte de esto.
Así mismo creo que no seria capaz
de complacer ni un poquito
de todo lo que una fabula requiere.
Ahí, de nuevo aterrizando
sobre esta tierra desierta,
llena de tanto y vacía de todo.
No me volveré a cantarte mis mañanas,
ni suplicarte mis noches...
Ha sido lo que debió ser.
Sin culpas para ti.
Pudo ser peor,
pero supongo que nada es malo,
hasta que se demuestre lo contrario.
Aterrice en la tierra desconocida
donde dejo a fuera,
olvidando el ayer que pudo ser
parte de un nuevo querer...