Aprendí,
que la vida no es sólo alegrías
y que la tristeza tiene tu sabor.
Aprendí,
a amarte locamente
y que de mi mente
no te puedo sacar.
Pero ya no estás
maldita sea mi suerte
y no sé qué hacer
para volver a verte,
vivo de recordar
los dias que se fueron,
los besos que no me das
y los que no volvieron.
Me consuela mirar
las fotos que a mi lado
sonreías feliz
y yo me sentí enamorado.
Aprendí tantas cosas
que me hicieron amarte
pero ahora no sé
como podré olvidarte.
Aprendí,
que no solo el sol calienta
y que bajo tu piel
hay leños que no se apagan.
Aprendí,
a verte cada noche
y hoy es un reproche
no tenerte junto a mi.