Amo la levedad del crepúsculo
las pausas y los silencios.
Amo de las tardes ese vacío
que dejan las ausencias.
Amo de las paredes los ladrillos
que veo si la pintura está rasgada.
Amo de los techos las goteras
cuando me avisan que está lloviendo.
Amo de la luna su noche,
que me la muestra y me deja verla.
Del cielo amo las estrellas
y ese sol que también me ama.
Amo las nubes viajeras
y el viento porque las hace bailar
Amo de las nubes su lluvia
y también su tempestad.
Amo la brisa mañanera
y las mañanas de soledad
Amo las noches y de las noches,
esas tardes que las dejan pasar.
Amo las eternas quimeras
los ensueños y las fantasías.
Amo de la comida sencilla
el mejor vino de reserva.
Amo los pies descalzos
y las manos libres de perlas.
Amo de la mirada fija
los ojos que atormentan.
De las risas, amo las sonrisas
penitentes sin motivo aparente.
Amo los miedos sin sentido
y busco el sentido a las suertes.
Amo de las vidas futuras
las pesadillas o los sueños del presente.
Amo la sencillez de mi vida
amo la complejidad de sus muertes.