Si despertara por fin y mis ojos se abrieran
destrabadas las cadenas de las manos
extendidas alas en la voz que canta
y gimiendo con el grito de agonía y esperanza
Si sonara la trompeta, la pisada del gobierno
destruyendo la amargura del vicio del aire
y parara el sitio de la ciudad del alma
si llorara cristales liberando el fuego
y granizara ese fulgor desde las nubes.
Hoy lo digo, hoy lo escribo
con el alma y sacrificio
Con sonidos guturales indecibles
¡Yo lo canto, lo declaro!
Hoy lloro en los pies del verbo
derrito mi rostro entre sus dedos
se enciende la antorcha en mi corona
despierto la belleza de la honra
Hoy se hagan uno los tiempos
coincidiendo el cielo con el suelo
empuño la hoz de mis versos inspirados
y muestro con mi antorcha
el camino al extraviado
Hoy despierto por fin, hoy mis ojos se han abierto
desmenuzadas las cadenas de mis manos
levantado el vuelo en canto santo
¡¡Ah ay!!
Dolor en paz la risa el llanto
¡El ser gime con un grito de hambre y nacimiento!
cuernos de la vanguardia angélica
están soplando, están sonando
y se escucha tras el trueno
¡los jinetes, los caballos!