Soy viuda de tus amores y tu viudo de mi presencia, me sumerjo en este mundo mal oliente,arrancas los pétalos de mi rosa condenándome a no saber si me quieres o no, ambulas en mis sueños y como un barco en el piélago te estrellas contra mis rocas perturbando a mi tranquilidad, obligando a mis lágrimas a que asesinen a mis ojos y y mejillas.
Ya no te siento, ya no me ves, tu mirada se perdió observando miles de flores y queriendo capturar su olor, a mi sentir lo congelaste justo en el momento en el que ímpetu de macho en celo creyó que era mejor un jardín vagabundo que una rosa estable.
Soy viuda de tus amores y tu viudo de mi presencia. Deseo oler nuevamente ese aroma que fertilizaba mis encantos, aquella taciturna voz es ahora tan solo un silbido que viaja a través del viento rosando hojas y pétalos… hoy soy viuda triste como todas pero sola como ninguna, hoy tu eres viudo, mi presencia se alejara de ti así como las tórtolas y mis caricias y Artemisa ya no brillara igual para ti porque ella también se alejara. Esto es difícil, no como encontrarle una salida al laberinto del minotauro pero es difícil porque desde hoy soy viuda de tus amores y tu viudo de mi presencia.