Con la A te digo mi Ansiedad
de Besos de esa Boca, con dos veces B.
Cielo, te digo con la tercera letra,
y te entrego mis Deseos con la D.
Esperas que me permite la noble E
mientras la F dice Fuego, Gris, aclara la G.
Hades, Infierno, Jardín, (te sueño) Karma,
en cuatro letras de un alfabeto que no acaba.
Lumbre que se refleja en la L solitaria,
digo Llave, Llano, Llamarada, Lluvia,
con la LL, que es mil veces más segura
que la Muerte de una M moribunda.
Nieblas, manto de la N de Nostalgias
son *Ñandutíes que una Ñ le regala,
Odiseas y Otoños, embelesados con la O,
y nuestras Pasiones, que sin la P suenan a nada.
Quimeras, Rambla, Sol, Templanza,
con cuatro letras del alfabeto que casi acaba,
Utopía, con la U, que por sí sola se basta,
mientras la V del Vals y la W del Whisky se embriagan.
Xilofón, madera para una X y para la Y, Yoga,
en el Zaguán donde te espero, gracias a la Z
tengo piel que se hace verbo, sustantivos y letras,
palabras, silencios, alfa y omega (de la A a la Z).
(*) plural de Ñanduti: palabra en idioma guaraní que significa “tejido muy fino que imita el de ciertas telarañas”