Quizás.... quizás .- le dije yo.- es que a veces se juntan muchos dolores en un solo instante y como que el corazón necesita un poquito de ayuda para soportar el peso de esos dolores que van envueltos en soledad.
O quizás, porque hay gente en este mundo que ha nacido para cargar en el corazón con el peso de su vida...
pero nadie puede hacerlo sola mi niña...
es que hay gente que camina más ligero y quizás han aprendido a dejar gran parte de su carga allí....
al borde de sus caminos y quizás... pues habrà que aprender a hacerlo.
Y ¿cuáles son los bordes de mis caminos Raúl?
¡Oh mi chica! .
pues todo aquél que entre a formar parte de tu corazón....
tu mamá, tu papá, tu hermano,
alguna amiga de esas a las que solamente a ella le cuentas
tus secretos, esos que son solamente tuyos,
porque siempre tiene que haber alguien en tu corazón.
¿Y tú Raúl?..
¿Tu tambien eres el borde de mis caminos?
Si tú quieres mi chica... yo tambien lo soy.
¿Y yo soy algo del borde de tus caminos Raúl?
¡Oh mi amiguita linda!!..
No lo sé... solo se que cuando necesito recoger alguna
flor para adornar mi alma pues.........
me acerco a ti,
y seguramente es porque tambien tu formas parte de mis caminos.
¿Puedo acurrucarme aquí juntito a ti Raúl?..
es que quiero que se haga ya de noche.
Claro que si mi chiquitita...
descansa un ratito.
pero recuerda como es la gente y habrán mal pensados.
No me importa Raúl...
es que ya no me importa.-
Al día siguiente, después de llegar de un trabajo
que fui a hacer a una empresa, supe...
cuando pasaba por el parque que mi chiquitita y hermosa amiga
se había lanzado desde la azotea de una de las torres
de veintisiete pisos.. esas que sirven como atalayas.
Ese fue el momento de mi silencio....
del silencio de mi corazón,
del silencio de mi alma,
del profundo llanto que no derrama lágrimas,
solo un pesar tan profundo..
como el peso de la vida cuando decide aplastarte.
como el peso de unas palabras que te dice la amiga
que aprecias desde lo màs profundo de tu corazòn....
esas palabras que quizàs no escuchaste
Sin embargo Francisco no se enteró que una de las razones era él, y siguió su vida como siempre.
La otra razón.. creo que esa por ahora no hay que decirla acá...
es que necesitas descansar.
Si mi amiguita.... tienes que descansar.
Recuerdo que en una de las ocasiones señora Lola,
en que te ponías a planchar la ropa, encontraste en uno de los bolsillos de Francisco... pues un pitillo de marihuana.
Yo.. que llegaba en esos momentos, te vi y me dijiste... \"Mira Raúl lo que encontré en el pantalón de Kaki\".... ¡ya se va a enterar este niño!....--
Yo me acerqué y te dije que me lo pasaras... (es que no quería que castigaras a Kaki porque yo sabía que resultaría peor... era mejor hablar con él...siempre me daba resultado)
pero tu... me volviste a decir que no me lo pasabas
y te lo introdujiste allí bajo tu blusa azúl.. allí...
entre tus senos y mirándome desafiante...
(pero con una mirada un poco especial) me dijiste
\"¡¡¡Quítamelo si puedes!!!\"
Y como estabas en el pasillo donde sueles tener la tabla del planchado, me acerqué a ti ,
y tu te pusiste tus manos en tu pecho
pero a la vez como yo estaba por detrás tuyo pues
no me quedó más remedio que cogerte de la cintura
para que no huyeras, porque habías empezado a
escabullirte para ir a tu habitación,
pero cuando te rodeé por la cintura tu te apegaste
a mí fricionando tu cuerpo contra el mío,
mientras seguías cubriendo con tus manos tus pechos
pero como incitándome a buscar allí.
Así que de esa manera llegamos a tu habitación..
yo siempre abrazándote y tu caminando
como queriendo huir de mi abrazo,,, (aunque no querías)
Íbamos tan pegados entre si que al llegar cerca de la cama, tu te tumbaste sobre ella
y yo que te tenía cogida por la cintura
pues por casualidad, caí sobre ti.
(si... fue por casualidad . porque la casualidad existe ¿o no? je je ).
Yo trataba de separar tus manos mientras
tu te acurrucabas más y más a mi hasta que cogiste
mis manos con las tuyas y las llevaste a tu pecho,
poniendolas entre tus senos, y demás está decir que yo por más que buscaba y buscaba ese pitillo,
y por más que rebuscaba tocando, acariciando,
y volviendo a acariciar pues no lo pude encontrar
(es que ya ni me interesaba encontralo je je )..
(el pitillo digo mal pensados).
La falda que llevabas puesta era como faldita escocesa, tan ajustadas que llevabas puesta esa falda que de repente no se como ,, ... no se si subió o bajó... pero solo supe de la calidéz de tu piel que se pegaba a la mía como una sola piel.
¡¡Qué hermosa eres señora Lola.. nunca me imaginé que tu piel fuera tan sedosa tan tersa y tus piernas... es que realmente eres una delicia de mujer, y tus senos....¡Mmmm! de verdad que eres una delicia de mujer. Y a tu edad... ¡¡¡Qué importa la edad cuando se ama!!!
Recuerdo tus susurros, tus susurros a mi oído.. esos que hablaban de amor
Ese día señora Lola... mi linda y especial señora Lola te convertiste en mi primer amor en mi único amor en mi respirar profundo, en mi primer latido
Y tu hija Sandra...(Sandrita) con sus ........ años... ella pasó ese día por el patio.. y nos vió por el ventanal, pero no dijo nada... se hizo como que no vió nada, y por la noche, ya cuando todos tenían que acostarse, Sandrita me llamó, y cuando fui a su cuarto ya estaba acostada en una de las literas (la de arriba) y me dijo que le dolían los pechos.
Claro.. a esa edad pues a la chicas creo , como se van desarrollando las glándulas mamarias pues ocurren ciertos dolores y tomando mi mano la llevó a uno de sus senos, esos que recién iban naciendo, y me dijo que le hiciera masajes.
Yo estaba un poco sorprendido, porque a Sandrita la conocía desde que tenía siete años y era de esas chicas que nunca están quietas pecosita de cara, con esa cara de nariz respingona....
Siempre andaba detrás de mi.. si yo iba para allá,,, allá iba ella,,, si yo iba para acá,,, para acá iba ella, así que quitando despacito mi mano de sus senos, acaricié su carita, su nariz y con el dorso de mi mano sus mejillas mientras le decía que yo siempre le querría, y que ahora tenía ella que dormir y soñar muy lindo.
(secretos del corazón de Sandrita.. secretos del mío)...... mi señora Lola ¿te importa señora Lola que más adelante hable de mi primer amor de mi único amor,
de mi primer latido,
de mi respirar profundo?
Se llama Elizabeth..
estoy seguro que si la hubieses conocido
Es que si la hubieses conocido...
tambien te habrías enamorado de ella,
es tan sencilla, tanta humildad,
es de esas chicas que siempre están queriendo
hacer algo para agradar y ser agradadas.
es que por allì, Elizabeth...por las alemanias...
te acercaste a mi stand y me