Estela Kobs

Culpa del vino

 

Esta manía que inquieta,

este sueño que alucino,

el vino de sábado por la noche,

la ilusión de que no amanezca

en mi cama los domingos.

 

Los recuerdos que al poeta

hacen sudar la gota fría,

contracciones cual saeta;

los deseos que reprimo,

se me refriega la utopía.

 

Mi soledad; la compañera,

copa a copa, mano a mano,

reza lo que los rezos anhelan:

fiesta de duendes en mi pollera,

bajo la luna, pero mundanos.

 

Huyen los versos despavoridos,

prudentes se esparcen las letras,

pero quizá es culpa del vino

esta manía de no saber recordar

sin soltar  las riendas en un poema