Ya no sirven las noches.
Si no puedo imaginarte.
Ya no hay sentido en dormir,
Si no puedo soñarte.
Tengo sueños abarrotados de miedo y dolor
Adornados con rostros de tristeza
Y muero lentamente en una esquina
Esperando que me salve tu belleza.
Pero aún no se soñarte,
Quizá, eres muy sublime para mi cabeza.
Es ilógico pensar que mis sueños
Son morada para una princesa.
Una princesa poco usual,
Pero sin duda por ella me pondría una armadura.
Una dama sin igual,
Que apaga las llamas y enciende la luna.
Esta noche fallare una vez más,
Mi cabeza se derrumbara buscando alivio.
Pero voy entendiendo
Que no quiero soñarte a ti,
Quiero soñar contigo.