Mientras lloro enmudecido detrás de los inviernos
mi silencio se siente en una constelación de estrellas
que en la nochen brillan y me reprochan glamurosas y bellas
porque mis almas palpitantes dejaron de ser tiernos.
He deseado que vuelvan las noches purpurinas
pero hoy mi montaña de la vida muere en agonía
y los días que pasamos en eterna alegría
ya no lo son porque culminó el destino de aquellas golondrinas .
Como ángel que en un ramal enredado estuviera
mi corazón se siente muy pálida y oscura
pero aunque esté metida en un vaivén , aún es pura ´
pero aún ha deseado morir en esta eterna primavera.