MEVE

Esta noche escribo...

Esta noche escribo porque
mi alma está abatida...

Después de huir tan freneticamente
de la soledad, del estar conmigo mismo.
Finalmente me encontre cara a cara con el
hombre del espejo.

El hombre que habla con el corazón
y con la mayor franqueza.
El hombre que conoce todo mi dolor...
Le huí a mi razón, a mi corazón
y a la tan necesaria soledad.

¿Como soy capaz de vivir
si una de las cosas mas hermosas
que hay en este mundo me ha sido
negada?, he sido apartado del amor
por el dolor que hay en mí.

Ahora cada vez que veo
a una mujer que me gusta,
me duele el pecho y mi cabeza
se acuerda del porque estoy
sufriendo.

Escribo con lágrimas y con sangre
que brota de mi alma, desgarrada
por los azares del amor.

Existen dolores que son crónicos
que siempre estan allí, sin importar
las dosis letales del alcohol...

La depresión envuelve mi vida
es parte de mí como aquel
hombre que por hacer algo
malo, se le ordenaba cargar con un muerto
encima para que él se pudra
junto con el cadáver.

No le deseo este castigo a ningún mortal,
ni siquiera a mi único enemigo.
Porque todos ustedes merecen,
por razón natural, ser acarisiados
por alguien que realmente los ame
y que no lo finja cruelmente
y que no lo finja cruelmente...

Viviré maldito, con este muerto,
con mis heridas y con estas
ganas de amar que por contenerlas
mi corazón se esta dañando.

Soy el desecho de muchas mujeres,
soy el despojo de soledad..
En esta ocación no soy poeta,
en esta ocación soy lo que un súcubo
dejo.

 

MEVE.