Hoy cuando desperté,
no pude evitar reír
…de los dos,
de mí.
En mi piel, busqué
en mi almohada
en mi ser,
en mí.
Nada,
ni un poco,
todo mi aroma
quedó en tu cuerpo
más, vino en el mío
ese olor que mata
y pervierte
el alma.
Me reí,
me reí de mi,
me reí de los dos
me reí de la confusión.
y si,
en el apuro,
me vestí de tu aroma
y llevaste puesto mi olor.