Como un silbido ensordecedor en la oscuridad de la noche,
Como el ocaso del sol,
Como el ladrido eterno de un animal herido,
Como el sonido del silencio,
Como la soledad en la noche,
Me siento triste y absurda, como las colegialas tontas,
Mi tristeza es la de una diosa que agoniza aunque se sabe inmortal
Mi cielo se siente oscuro como esa madrugada trágica
Que los seres humanos deseamos olvidar,
Hay sueños rotos, reproches al destino, ilusiones quebradas
La decepción es inconmensurable a nada misma,
La angustia y el dolor se juntan
Hay una plaza cargada de niños correteando y gritando por los jugos,
Y yo ahí, sintiendo este vacío magnífico,
Esta decepción tan grande,
Sentimientos mezclados, da la sensación de irrealidad,
De ilusión, de un mundo imaginario,
Ese mundo lo cree para los dos,
Sin embargo…
Estoy sola en mi mundo imaginario,
Lo magnifique y lo idealice para los dos,
Pero la magia y la ilusión solo existen en los cuentos de hadas,
Tengo un cartel en mis ojos,
Que me dicen, bienvenida a tu realidad.