El amor nace de nada
y muere de todo;
la mitad de las equivocaciones en esta vida
surgen de que cuando debemos pensar: sentimos,
y cuando debemos sentir: pensamos.
Es así de simple, y no lo digo yo,
no se puede esperar un amor eterno
y querer consumirlo en una llama.
El amor siempre nace de todo
y muere por nada...