TU NOBLEZA
La nobleza de una persona
no se centra
en hablar demasiado
ni en agredir
a su prójimo.
solo Los dementes hablan sin descanso
Inclusive violentando al otro,
porque así encuentran consuelo
para sus penas.
Con mucha frecuencia
son nuestras propias palabras o acciones
las que nos condenan,
las que revelan al mundo
toda nuestra mediocridad.
Si vivimos en este bello planeta
a merced de la confusión,
creyendo que el verbo existe
apenas para ofender,
serán nuestras vidas una desgracia
que la muchedumbre
no sabrá comprender.
El sabio es humilde,
habla con calma
porque cree en el amor,
y aunque descubra ofensa
en la palabra airada,
corrige o enseña
sin guardar rencor.
CAR-MAR (22-V-2007)