¿Recuerdas bien nuestro último beso?
fue una tarde nublada, como hoy,
como hoy que tus ojos lloraban
mientras tus pasos lentos avanzaban
y mi impotencia infinita lamentaba...
¿Qué nos pasó amor, si tanto tú me amabas?
A dónde se fue la vida que a tu lado
solo junto a ti yo tanto, tanto anhelaba.
Hoy te digo hasta nunca, corazón
pero dame un beso y un adiós amada mía
dame una amarga y dulce despedida
por que el recuerdo en mi se queda
mientras tu alma lejos, muy lejos emigra.
Y si mis labios no pudieron reternerte
entonces dime adiós ¡Adiós para siempre!
Despídete de mis caricias y mis rimas,
despídete de mi aliento y de mis restos,
dile adiós a momentos que jamás pasaron
Y si mis versos jamás te enamoraron,
no tienes tú la culpa en realidad
la verdad es que nunca me gustaron.
Siénteme, siénteme otra vez, llora conmigo,
siente mis letras y siente mi vejez
mira a mis ojos que te admiran una y otra vez.
Adiós, adiós por última vez,
pero amada mía, nunca dudes en volver
por que aunque lejos de mi vida estés
mis cobijas jóvenes te sabrán envolver.
Amor, te lloran mis letras tristes, anhelando que tú quieras volver.
L. Roberto M. Uriostegui