No puedo darte soluciones para todos tus problemas de la vida, ni tengo respuestas para todas tus dudas o temores…
Pero puedo escucharte y buscarlas junto a ti.
No puedo cambiar tu pasado ni tu futuro…
Pero cuando me necesites estaré contigo.
No puedo evitar que tropieces solo…
Pero puedo ofrecerte mi mano para que te sujetes y no caigas.
Tus alegrías tus triunfos y tus éxitos no son míos…
Pero disfruto sinceramente cuando te veo feliz.
No juzgo las decisiones que tomas en la vida…
Pero me limito a apoyarte, a estimularte y a ayudarte si me lo pides.
No puedo evitar tus sufrimientos cuando alguna pena te parta el corazón…
Pero puedo estar a tu lado para llorar contigo, y recoger los pedazos para armarlo nuevamente.
No puedo decirte quien eres ni quien deberías ser…
Pero puedo quererte y ser tu amiga, y aceptarte como eres.