Quiero morir en tus brazos
en tu piel, en tu mirada
quiero morir muy despacio
en tus besos, en tus labios,
quiero morir en tu corazón…
Quiero morir en tu cuerpo
en tu aliento, en tu respirar
quiero morir en el jardín de tu vientre
en tu alegría, en tu sonrisa
en la pálida caricia de tu peregrinar…
Quiero morir en tus lágrimas
en tu llanto, en tu cielo sin estrellas,
en tu perdido sendero, en tu reflejo,
y en el mar de tormentos sin dicha, sin arrabal…
Y tan solo quiero vivir en tu alma por toda la eternidad…