Tanto que hablar
y nadie con quien hacerlo,
tanta soledad
ahoga tu recuerdo,
tanto que escribir
y tus ojos no leen mis versos,
tanto que sentir
y tú
tan lejos...
Tanto deseo
escuchar el latir de tu pecho,
tanto quiero
dormir en el aroma de tu cuerpo,
¡tanto amor!
y tú
sin saberlo.