Si las rosas no pincharan…
No serían rosas pues querer tener su belleza conlleva sufrimiento y dolor, y si tus ojos no lloran ni sangran tus manos quizás es porque no son rosas lo que tienes sino, de flores, simples ramos.
Si las rosas no olieran…
No serían rosas porque es su aroma lo que enamora, es su olor lo que atrae y atrapa, es eso que siente al olerlas recién cortadas.
Si al fin y al cabo las rosas no se regalaran…
No serían rosas.
No serían flores.
No serían plantas.
No serían nada.
¿Qué sentido tendría el mundo sin ti?
Mi mundo sin ti…
No es más que un jardín sin rosas.
No es más que un florero vacío.
No es más que un rama reseco sin valor alguno más que el recuerdo del que tuvo.