Dos luceros en un rostro maquillado de belleza
Como un botón de rosa que recién abre sus pétalos
Suave color que la adorna
Como tener manos delicadas como la seda
Para acariciarla mientras está sobre la palma
Temblorosa para no dañarla y mirarla con atención
Como los alumbra los rayos del sol
Donde a todos los da su calor
Flor que inquieta su forma de mirar
Con su fuego que enciende hasta la leña mojada
Con su pación desenfrenada en el amor
Sellándolo con sus labios tentadores
Instando más allá de la imaginación
De una mente que piense con el corazón
Capullo de fragancia incomparable
Aroma más grato de lo que ofrecieron los reyes magos
Dejando el deseo venerar por la eternidad
Sin ser marchitada ni la naturaleza te maltrate
Flor que guardare en el corazón
Porque tu ternura a echo que te extrañe
Al mirar tus labios siento el deseo de tus besos
De sentir tu voz ferrada a mí pecho
Tengo mucho que sentir junto a ti amor
Como la suavidad de tu piel igual que la seda
Conocerte desde tu cabello hasta la planta de tus pies
Donde no sea sueño sino una realidad
Donde no sea un cariño de cristal
Sea una ternura audaz, efusiva en zalema
Siempre hay por quien vivir o luchar
A un a distancias donde los separa el mar
Ho las fronteras que nada saben de amar
Nadie te amara como yo a un quesea un amor secreto
Sé que allegado tarde en la distancia serás parte de mí
Autor eco del alma
Derechos reservados
Antofagasta, 27-01-2014