Que dices de quien llega
y se deposita en tus ojos,
en la penumbra de un día sin sentidos.
Que dices de la lluvia que nos acompaña,
y que marca nuestro primer encuentro.
Que dices de las miradas
que esconden cierto rumor,
y de los roces de nuestras manos
que guardan sensaciones y aspiraciones con deseo...
Que dices de las alineadas
y delicadas letras
que se pierden en tinta
cuando intercambiamos misterios...
Que dices de decirte lo que existe
sobre mis ojos cuando te veo,
y el viento que corre por el cuerpo...
Que dices de los encuentros casuales
en los que era inevitable
y por acciones espontaneas
no dejas de sujetarme...
Que dices del café que se ha bebido,
de mi lápiz esfumando tu rostro,
de las hormigas que pasan.
Dime que dices...
de esos besos que se dieron,
de esos corazones acelerados,
de los silencios, de lo extraño.
Dime, que en este tiempo
ya nos hemos olvidado
que ya no resurgirán nuevos versos,
y que la tinta se ha gastado,
y que si te vuelvo a ver
mis ojos no recorrerán tus labios,
que no sentirás mas nada.
Solo dime que dices...