Cuanto ha pasado desde el viejo día
en que tan cansada te encontraría,
mucho, mucho tiempo transcurriría
para saber que por siempre te querría.
Querido mío, siempre has estado
tan cerca de mi, aún ocupado
aún como fuese, siempre esperando
sin exigir nunca,sin esperar nada a cambio.
Querido mío, mi viejo amigo
aquel que quise sin ser querido
aquel que espera y paciente ofrenda
una amistad que no da cualquiera.
Querido mío, mi querido amigo
dulce tormento de mi ratos frios,
compañero amable de tanto tiempo
que hoy regresa tan feliz y risueño.
¡Que dicha verte! despues del tiempo
en que a dos amantes los cura el viento
llevando en el esos sufrimientos
que van volando como vuela el cielo.
Mi querido amigo, que más decirte
tan solo queda por esparcirse
esta amistad tan fuerte ahora
y decirte gracias, no, eso ya sobra.