Las normas cunden,
Cómo abruman los límites.
Mi yo, revive.
En el baldío
Se propaga el desánimo.
Luce el retoño.
En la ciudad
Lucen enormes Bancos.
Huele la estafa.
Las atalayas
Permiten el progreso.
¿Y los fisgones?
Mal informados,
Emitimos el voto.
¡Soy responsable!
La Opinión pública,
Dictada por el Jefe.
¿Alguién lo entiende?
Con la cordura
Alcanzamos el vértigo.
¡Grave locura!
Tres grandes luces:
Horror, amor y tiento.
¡Laboratorio!