Fernandotorres

DULCE PÁJARO DE JUVENTUD

La quisieron como acompañante

durante las largas horas del día.

Como paño de lágrimas de dudas amorosas.

(Ella, soñadora de la sutil caricia

de la mañana)

La quisieron como víctima

para pisarle su corazón limpio,

como tonta a quien bailar el agua

mientras pensaban en su cuerpo.

(Ella, que ansiaba dulcemente

un abrazo le atravesase el alma).

Entretenimiento

de sus aburridas vidas,

actriz perfecta

del papel que deseaban.

 

Quise amarla como se merecía,

pero ya tenía el cuerpo prendido en el aire.

(Ella, que buscaba solo un semejante

con quien compartir la sombra

en un día de Sol ardiente)