Nada más que solo silencio.
La luz opaca de esta bombilla se dirige ciegamente a mis ojos, y aunque débil, los adormece.
Todo y cada uno de los objetos más insignificantes, improductivos, descoloridos, se encuentran con vida de la mano de personas que sin conocerlas no se cansan de aparecer en mi mente…
…gritos, risas, llantos, gemidos, e innumerables sonidos navegan por los mares de mi conciencia; sin embargo mis oídos siguen escuchando nada más que solo silencio.
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SCAHEGA