Ella se quedó en aquél lugar tan vacio, pero lleno de vida,
con amaneceres, que sus ojos nunca vieron;
con la garganta reseca de \"te quieros\" contenidos;
las piernas como de concreto, manos llenas de vida,
los huesos faltos de esperanza,
el corazón amnesico y la piel llena de sueños.