Por mucho tiempo había esperado por ti,
por conocerte. Soñaba con nuestra amistad.
Dulce y tierna, como soñar sin despertar y
volar. Saber que también soñabas con mi amistad.
Que camináramos juntos. Queriendo sorprenderme
con tus detalles, con tu dulzura, con tus caricias
y abrazos en lo más profundo de mi alma.
Con tus te amo. Con tu mirada tan apasionada.
Con tu voz tan dulce que es la melodía que
anhelo escuchar. Con tu sonrisa llena de amor,
paz y esperanza. Que alegra mi alma y
llena todo en mí. TE AMO ESPIRITU SANTO.