Brindo hoy por tu ausencia,
me embriago de ti, de distancia,
me sofoco de lástima.
Brindo porque te fuiste
y con ello me arrebataste el respiro,
brindo porque en medio de todos no estoy con nadie.
Brindo porque me muero a diario
porque te desaparezco todos los días.
Brindo porque se me han de ir las tardes tan sólo contemplando.
Brindo por esa triste alegría.