L. Roberto M. Uriostegui

Te miré

Te miré ahí a lo lejos entre la gente

y ahí de lejos vi tus ojos color café,

sentí como estar vivo se siente,

y te amé como un loco ferviente.

 

Yo te vi, pero tu no me viste,

y en aquel juego de miradas

juro que de a ratos te reiste,

Tu me viste, pero yo no te veía.

 

Pero ahora que mis versos lees,

la profundidad de mi sentido

puedes finalmente entender,

mira a mis ojos y me vas a creer.

 

Hoy te escribo a tí niña hermosa,

a quién por las noches cobijé

cuyos sueños vimos juntos nacer,

hoy te escribo, por que te necesité.

 

Hoy como ayer, te vuelvo a mirar,

te vuelvo a sentir y te vuelvo a soñar

vuelvo a querer tus manos tocar,

y por un momento tus labios rosar.