siempre fuiste tu una sonrisa en mi cara,
y una ilusión que florecía en mi cada mañana;
y siempre fuiste esa esperanza
que renacía en mi alma,
esperanza por compartir junto a ti
mis días en esta vida ingrata.
siempre fuiste tu ese sentimiento hermoso
que le daba vida a mi corazón,
y que a ratos le hacia vertir lagrimas de emoción,
y también fuiste esa musa
que me inspiraba cada mañana
en honor a tu gracia que me cautivaba.
siempre fuiste tu esa estrella
que iluminaba mis noches solitarias
y su luz era la que guiaba mis pasos
hacia esa dicha tan anhelada,
y fuiste esa dulce plegaria
que cada noche susurraba
esperando que fuese realidad
esa dicha que solo soñaba.
siempre fuiste tu lo que tanto soñe,
pero que nunca..., nunca podra ser...