Como aquél día
en que estaba yo leyendo
recostada en mi cama
oí a mamá
ella gritaba
¡No puede ser!
lo único que pasaba por mi mente era:
ojalá sea la televisión
mientras lo dudaba
Aquel llanto
era como si
hubiera empezado
una tormenta
y solo se oyeran
truenos y relámpagos
Salté de mi cama
todavía con el libro en la mano
y fui hasta su recámara
Encontré a mamá
tirada en la cama
envuelta en lágrimas
entonces vi a papá
me abrazó fuertemente
mientras me lo decía