Murialdo Chicaiza

BALADA TRISTE

 

Balada triste es mi vida que se apaga intermitente

la rosa ya no existe

mitología me es lo hermoso.

¿Cuántas veces me dijiste que sembrabas un amor?

con tus ojos lo jurabas

mas lo negó el tiempo, mi cielo se nubló

-lloro en un rincón de esta tarde-

La calma se escondía cual sombra

gemía mi alma, negra alondra.

Por la noche un hálito de pestañas

cruzaba por las estrellas.

¡mis manos crujían de histeria!

Mordían la tierra, mi amor se apagaba

tu amor se apagaba.

Hoy la fuente me habla con dulzura de niña

la brisa cuenta mis secretos

a oídos de un viejo chopo gris.

¿Señor por qué la amaré así?

amor, aún llora en mi ventana cada mañana

aquel pájaro azul que tomaste con tus manos

de suavidad espiritual.

El estanque tiene ondas más grandes que tu alma

una onda es un poema

un poema arrojado al agua.

¿Qué colores tiene el arco iris que no hayan tenido tus ojos?

Regreso a ver mis huellas, azucenas marchitas

que se pierden tras mi espalda

 el alba me ha llevado a morir en su morada.

¿Qué no tienen tus cabellos

que no tenga el trigo en calma?

El cielo da una mirada por cada estrella que abraza

yo me encuentro de rodillas

aferrándome a la nada.