Cuéntame papá...
un cuento bonito
que hable de princesas
de castillos y de reinas
de todo un poquito.
Cuéntame papá...
¿por qué los ruiseñores
presumen de vivos colores
y su cantarina voz se escucha
todos los días en los albores?
Cuéntame papá...
si las nubes llevan agua del mar
¿por qué las olas de espuma blancas
siguen llegando a las playas
y mojan mis pies al pasar?
Cuéntame papá...
¿cómo bajan del cielo y se elevan,
por que llueve tanto en primavera
y unas veces son como el algodón
y otras negras como el carbón?
Cuéntame papá...
¿por qué me quieres tanto
si me porto tan mal a ratos,
me peleo con mis hermanos
y mis gritos son de espanto?
Yo quiero papá que me perdones,
ya no te daré trabajo ni dolores
y me casaré con un príncipe azul
que sea tan alto y guapo como tú.
Mi padre me acunó entre sus brazos
dándome el más fuerte de los abrazos,
acarició mis largos cabellos dorados
y medijo entre besos y suspiros:
Las cosas, mi querida niñita,
no son tan dulces y bonitas
como tu inocencia las pinta.
Del cuento que tanto anhelas
tú serás siempre mi princesa,
mi reina, mi vida entera,
ruiseñor que te embelesa.
Y sus vivos y bellos colores
forman el iris de tus ojos marrones
y tu preciosa boquita las flores
del jardín de mis amores.
Y las nubes ¡ay las nubes!
allá arriba en el ancho cielo
saben lo mucho que te quiero
y dejarán agua en el ancho mar
para en la playa tus pies besar.
¡Y por hoy dejemos de jugar,
papá mañana tiene que madrugar!
y esta noche mi niña a de soñar
con nubes, lluvia, cielo y mar.
Fina